domingo, 27 de noviembre de 2011

Subcapítulo 1 (Capítulo 34)

(Siegfried continúa la narración)

Me desperté al no sentir a Irina a mi lado. Me incorporé y vi que no estaba. Sus armas seguían apoyadas en la pared por lo que no podía haberse ido por su cuenta. Me fijé en que sus botas habían desaparecido y que su almohada estaba empapada en sudor.
Me puse en pie rápidamente y salí de la habitación. Comencé a buscarla con el corazón desbocado.
Estuve mirando por los pasillos un buen rato pero no di con ella. Corrí a la habitación de Jin y llamé con fuerza. Fue Darky quien abrió la puerta, tenía cara de dormido.
-Siegfried, ¿qué pasa?-preguntó frotándose un ojo
-Irina ha desaparecido-
-¿Cómo que ha desaparecido?-Jin apareció tras Darky. A ambos se les quitó la cara de sueño
-Sí, no sé donde está, me he despertado y no estaba en la cama, la he buscado por los pasillos pero no la he visto-estaba nervioso
-Huele a...-Darky miró a ambos lados del pasillo
-¿A qué?-Jin salió de la habitación
-A ella-Darky salió del cuarto y se puso a caminar. Jin y yo fuimos tras él. Después de no mucho tiempo fuimos a dar la puerta de la habitación más alejada del castillo
-¿Está aquí?-susurré
Darky asintió. Jin se acercó a la puerta y cogió el pomo. Intentó abrirlo pero estaba cerrado desde dentro.
-Sitio-pidió
Darky y yo nos apartamos un poco y Jin tiró la puerta abajo. Entré el segundo. Vi a Irina tendida en el suelo junto con Ismael, este tenía una daga en la mano.
-¡Apártate de ella!-Jin preparó sus puños y obligó a Ismael a alejarse. Yo me acerqué a Irina rápidamente y me arrodillé a su lado. Su piel era pálida y su cara estaba mojada. Significaba que había estado llorando. La toqué y sentí que estaba fría como el hielo
-Irina...-susurré. No respiraba pues su abdomen no se hinchaba. Puse mi oído en su pecho, no oí nada. Su corazón estaba parado.
-¡¿Qué le has hecho?!-grité con rabia. La cogí en brazos, apoyé su cabeza en mi hombro izquierdo
-Irina, por favor no...-rogué mientras mis ojos se empañaban. Le acaricié la cara con la mano derecha.
-¿Cómo has podido traicionarla?-preguntó Darky
-El trabajo es el trabajo-rió Ismael
-Eres un monstruo, debí matarte cuando tuve oportunidad-Jin estaba furioso
-Lástima, no lo has hecho y aunque lo hubieses intentado no habrías podido-
-Eres un hijo de...-
-No me insultes, yo no te he insultado a ti-
-¿Cómo has podido matarla? A ella que te lo ha dado todo, desde su amor hasta su amistad-
-Trabajo Jin, trabajo-
-Irina...-volví a decir, no podía creer lo que veían mis ojos y sentía mi piel. Irina estaba muerta en mis brazos y yo no pude hacer nada para evitarlo
-Lo siento chicos, me tengo que ir, ¡nos vemos!-al segundo desapareció tirándose por la ventana
-Hijo de su madre-Darky estaba igual de furioso que Jin. Ambos se acercaron a mí y se arrodillaron
-Irina...-Jin acarició su pelo.
-No puedo creer que...-Darky tocó sus manos. Se estremeció al ver que estaban heladas.
-¡¡No!!-grité lleno de ira, apreté su cuerpo sin vida contra el mío. Lloré sobre su rostro.
-¡¿Qué son esos gritos?!-la voz de Ike apareció tras la puerta, -oh no...-exclamó al ver la escena. Escuché como se acercaba con pasos lentos, -¿qué ha pasado?-envainó su arma
-Ismael nos ha traicionado, juro matarle-maldijo Jin
-¿Irina?-dijo una voz. Giré levemente la cabeza y vi a Devil junto con Dante
-No...-se acercó rápidamente y se arrodilló frente a mí. Tocó su cara y retiró la mano al ver que estaba fría, -Irina...-sus ojos se empañaron y comenzó a llorar en silencio
-Roxy...-Dante se acercó a ella y la abrazó, consolándola.
Todos en la sala enmudecimos mientras yo lloraba desconsoladamente sobre el cuerpo de mi amor, no pude hacer nada por protegerla y eso era lo que más me dolía. Seguramente me habría llamado pero no la escuché. Me maldije a mí mismo por no haber estado a su lado. Estuvimos mucho rato en la sala, junto a ella...

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